Las campañas del presidente y el hoy favorito demócrata tomaron impulso hace cuatro años en un Estado en el que este lunes exhibieron su poderío
Hace cuatro años, en este mismo lugar, eran dos piedras en los zapatos, derecho e izquierdo, del establishment político estadounidense. Un magnate que venía de los realities televisivos y un senador independiente que llevaba 40 años tratando de hacer una revolución. El millonario y el azote de los millonarios. El populista de derechas y el populista de izquierdas.
Hasta llegar a New Hampshire en 2016, los candidatos Donald Trump y Bernie Sanders habían cosechado poco más que titulares de prensa, irritación de la clase política y sendas derrotas en los caucus de Iowa contra Ted Cruz y Hillary Clinton, dos candidatos pata negra de sus respectivos partidos. Los dos llegaron a este pequeño Estado montañoso como los candidatos rebeldes, pero salieron con victorias contundentes. Hoy Trump es el presidente de Estados Unidos. Y Sanders, que finalmente perdió la nominación frente a Clinton, es ya el candidato demócrata favorito, según los sondeos, para enfrentarse a Trump en las elecciones de noviembre.
Toda la información en:
https://elpais.com/internacional/2020/02/11/estados_unidos/1581451401_016019.html