Mena echa la bolita a municipios, acepta que violencia crece

El gobernador del estado, Marco Antonio Mena Rodríguez reconoció deficiencias importantes en la conformación de policiales municipales acreditados en la entidad”, lo que complica abatir la inseguridad.
 En entrevista, el mandatario dijo que las presidentas y presidentes municipales “han mostrado un buena disposición, pero necesitamos más allá de la disposición, necesitamos resultados importantes en la conformación de las fuerzas policiales municipales ese es un reto, es muy claro, ahí tenemos deficiencias importantes”.
Empero, dijo que Tlaxcala no somos el único estado con esa problemática, “es un tema nacional por eso es importante tenerlo en mente”.
Consideró que hay dos retos importantes en este sentido, uno es el cuidado con las áreas limítrofes  y el segundo es fortalecer el ámbito municipal para contrarrestar los problemas de inseguridad que se vive actualmente.
Recordó que en 2017 Tlaxcala tuvo índices de violencia superiores al de los años previos en el ámbito nacional.
“Nosotros tenemos dos retos al respecto, primero cuidar el área limítrofe, si bien la región ha tenido problemas en nuestro estados vecinos, hemos dedicado mayor inversión que estará desplegando este año para tener arcos de seguridad en las entradas al estado en diferentes casetas de fuerzas conjuntas, con policía estatal, policía federal, elementos del ejército para esta monitoreando donde se han registrado eventos de delincuencia”, indicó.
Mena Rodríguez insistió en que necesitan que los municipios acrediten a sus policías, para que puedan disponer de un arma porque, si no, no es posible que un elemento tenga una.
También, dijo, la policía  debe estar capacitada en el trabajo de prevención e inhibición del delito, así tener un relación coordinada y más efectivo con la policía estatal y las instancias federales.
Refirió que a nivel nacional Tlaxcala no tiene números que sean equiparables al número de delitos que suceden en otros estados, pero no se debe entender esta circunstancia como un hecho que les haga bajar el paso o el ritmo.