Queda impune acoso laboral en Tlaxcala

Edith Méndez Ahuactzi, directora del Colectivo Mujer y Utopía de Tlaxcala, lamentó el caso de una trabajadora del ayuntamiento de Españita, quien denunció ser víctima de acoso laboral y sexual, “pues a pesar de ser un delito que está tipificado, la impunidad se impone”.

En entrevista para www.agendatlaxcala.com, la activista dijo que ese hecho es una evidencia más de que las mujeres siguen siendo violentadas por los hombres, “en ese caso, donde el atacante es un servidor público de un municipio, se evidencia la falta de sensibilidad y capacitación que existe en el tema de violencia de género o desde la perspectiva de género”.

“Es lamentable que se sigan presentando esos hecho, a los que se suma que cuando las mujeres lo hacen público se encuentran con un rechazo social y cultural por parte de la población, pues ahora en las redes sociales siguen siendo agredidas... aún no se entiende que éste es un delito grave que sigue colocando a las mujeres en desigualdad”.

Méndez Ahuactzi dijo que desde la sociedad civil organizada “hemos exigido que los protocolos de atención sean los que marca la legislación, pues aunque existen estos mecanismos no son utilizados de manera adecuada y no se cuentan con modelos de atención para atender estos tipos de violencia, entonces de nada sirve que existan sanciones con muchos años de castigo si las autoridades no hacen lo que les corresponde, es necesario que no caigan en la impunidad, que es un tema que también afecta, pues al no tener sanciones parece que los hombres tienen la posibilidad de seguir agrediendo si tener consecuencias”.

Añadió que cuando se exige la reparación del daño, “muchas veces las mujeres son revictimizadas y no se les da la atención adecuada, por lo que no se llega a término el seguimiento legal de los casos de violencia de género”.

“Por lo que exigimos a las autoridades que independientemente del cargo que ocupen los hombres agresores se apliquen sanciones”,

Agregó que en Tlaxcala “hay una cifra negra, es decir de los casos que ocurren y se llegan a denunciar es una pequeña parte de las situaciones registradas en estos espacios, ya que muchas mujeres no sólo son víctimas de estos delitos sino que son amenazadas con perder su trabajo o no se les cree”.

Enfatizó que Tlaxcala sigue siendo un estado machista y misógino en el que la norma legal no se aplica, por lo que las cifras siguen aumentando, por eso la entidad sigue en los primeros lugares en cuanto a violencia contra las mujeres.

Aunado a lo anterior, dijo, en los últimos años se ha visto pasividad por parte de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), pues ante estos hechos no ha realizado acciones estratégicas ni ha manifestado una postura clara respecto del tema de violencia de género.