Freno a los acelerados por Gaby Flores N

La gira de Andrés Manuel López Obrador por Tlaxcala desarmó a la facción belicosa de Morena.

Muchos creyeron que el Presidente Electo llegaría con ánimo de pleito, pero en realidad fue todo lo contrario: pidió respeto y colaboración a sus seguidores con el gobierno que encabeza Marco Mena.

Y no era para menos, pues hay que recordar que Tlaxcala fue el estado donde López Obrador tuvo la segunda mayor votación, proporcionalmente hablando, entre las entidades del país.

Diputados locales y federales, así como Senadores, emanados de los partidos que integraron la coalición “Juntos Haremos Historia”, escucharon de labios del propio tabasqueño la instrucción de trabajar en unidad con el Gobernador Marco Mena para servir al pueblo tlaxcalteca.

De hecho, fueron testigos del momento en que aclaró que los programas federales son de todos, no del Gobierno de la República, y que, en Tlaxcala, el Gobernador Mena será quien los coordine políticamente.

Así, paró en seco a algunos acelerados que vieron en su ascenso al poder una oportunidad para hacer camino político rumbo a futuros procesos electorales.

COMPROMISOS CON TLAXCALA.

La visita de López Obrador significó importantes compromisos que beneficiarán a Tlaxcala.

Con el Gobernador no solo habló del Programa Estatal de Becas, sino de la creación de dos nuevas universidades, y la continuidad de programas federales como Prospera, Atención a Adultos Mayores, Apoyo a Productores y Microcréditos.

Ello sin contar apoyos para la canasta básica y garantizar el abasto de medicamentos.

Se sabe que el Gobernador le planteó directamente al Presidente Electo su ayuda para poner en marcha proyectos de mejoramiento carretero en las vías Tlaxcala-Apizaco, Chiautempan-Puebla y Apizaco-Huamantla-Puebla, así como la implementación de una estrategia de combate a la pobreza, la cual fue uno de los compromisos de campaña del Ejecutivo estatal.

Ante ello, el Presidente Electo ofreció analizar estos proyectos para incluirlos en el presupuesto del siguiente año.

Todo este contexto lleva a pensar que el próximo gobierno federal llevará una buena relación de trabajo con el gobierno estatal, desdibujando expectativas de confrontación que suponían algunos radicales de Morena.

JALÓN DE OREJAS A LORENA.

Versiones de quienes acudieron a la reunión de trabajo que encabezó López Obrador y Marco Mena con el gabinete estatal, integrantes de la legislatura local, y diputados federales y Senadores por Tlaxcala, coinciden en que el Presidente Electo dirigió un claro mensaje a la diputada federal Lorena Cuéllar Cisneros, quien, tras saberse Coordinadora Estatal de Programas de Desarrollo, perdió el piso e incurrió en errores políticos.

Se dice que el político tabasqueño abrió un paréntesis para decirle a los legisladores de Morena, PT y PES que asuman como coordinador político de los programas federales al Gobernador Marco Mena, y a la próxima titular de la delegación federal en Tlaxcala, como coordinadora administrativa de los mismos. 

A más de uno estas palabras significaron un jalón de orejas a la ex candidata a la gubernatura estatal, quien, junto con su equipo cercano, había desplegado una campaña de promoción personal en los municipios, colgándose de la investidura que le prometió el Presidente Electo.

“Por la austeridad nada más va ser una delegación del Gobierno Federal, una coordinación que va a estar a cargo de ella, pero eso es para fines administrativos; en términos políticos, es el ciudadano Gobernador el coordinador de todos estos programas. Lorena, y todos, aprovecho, legisladores que tienen que ver con nuestro movimiento, les pido que actuemos con unidad, con respeto. Este es el acuerdo, que seamos muy respetuosos”. Así lo dijo. Zas!

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