¿El retorno de la maestra Gordillo al SNTE?

En México no es noticia la reintegración de varios políticos a los primeros niveles de gobierno, pertenezcan o no, al partido que llega al poder. El propio candidato por el PRI (Meade) es un ejemplo muy claro; dijo ser antipartidista, pero se vistió de azul y después de tricolor en los momentos oportunos. Como él existen muchos más a nivel nacional, estatal y municipal.

Al momento, ya han sido anunciados por el próximo titular del poder Ejecutivo varios personajes para ocupar secretarías de las llamadas de primer nivel en el próximo gabinete; sin embargo, eso no sería trascendente, sino fueran personas severamente cuestionadas por su proceder administrativo, como el caso de Marcelo Ebrard siendo Jefe de Gobierno de la Ciudad de México (2006-2012) y adversario de AMLO para ser candidato presidencial de la coalición PRD-PT-MC para las elecciones de 2012 y Manuel Bartlett Díaz quien fue Secretario de Gobernación (1988) y presunto operador de hacer caer el sistema en el momento de dar a conocer al ganador entre los candidatos Carlos Salinas de Gortari y Cuauhtémoc Cárdenas. Dicen “las malas lenguas” que así logró hacer ganar a quien había perdido.

Existe otro personaje que sin haber ocupado un cargo de primer nivel dentro de algún gobierno federal, se convirtió en un ente destacado y poderoso a nivel nacional; me refiero a Elba Esther Gordillo Morales exlíder del SNTE. A ella la acusaron de haber utilizado 1,978 millones de pesos de la organización sindical para utilizarlos en gastos personales y, para ello, la PGR la acusó de lavado de dinero y delincuencia organizada, además de defraudación fiscal, ya que nunca pagó al fisco por esa cantidad. Pero la PGR nunca continúo la tercera acusación por ser fácil para la maestra haberla subsanado; en cambio, la primera y la segunda, según ellos, era imposible que las resolviera y por ende, lograr salir de la cárcel.

Sin embargo, algo les falló y un Magistrado consideró que gastarse el dinero producto de las cuotas sindicales, no era delito grave y los delitos de lavado de dinero y delincuencia organizada al no tener los elementos probatorios suficientes por la parte acusatoria, no le quedó otra que exonerarla y otorgarle la libertad.

Dicho dictamen hace ver, hasta al más ingenuo, que fue un asunto político y no jurídico. Dándole a la señora Gordillo el papel de víctima en esta telenovela, sin dar importancia el que haya tomado esos 1,978 millones para su beneficio personal.

Desgraciadamente, toda esa telenovela hace percibir dos cosas: primero, un México donde el sistema judicial es exageradamente malo y, el segundo, una ciudadanía con una memoria histórica muy escasa, perdonando o por lo menos justificando a personajes deshonestos. Ante ello, pregunto: ¿la mala justicia seguirá siendo una constante en la vida cotidiana de todos los que vivimos en México? Soy uno de los millones de mexicanos que no queremos salir del país por esos actos de mala justicia, además, no tenemos el recurso económico suficiente para hacerlo; pero sí queremos vivir bajo un régimen de igualdad, libertad y derecho.

Sin darle tanta vuelta al caso, al Gobierno federal en turno le falló su Reforma Educativa; tanto así, que los propios maestros la rechazan al sentir que fueron dañados en sus derechos laborales, logrados a través de largos años de lucha sindical. Pero además, nunca vieron resultados favorables en uno de los objetivos principales de la Reforma, lograr una calidad educativa.

Ante tal molestia, un gran número de docentes han manifestado por diferentes medios que no ven con malos ojos que regrese la Maestra a la dirigencia nacional e incluso, como es costumbre en México, algunos que fueron sus detractores, ahora le piden que regrese.

Ante ello ¿qué se avizora? seguramente una lucha sindical interna donde unos apoyarán a la Maestra para que retome el liderazgo sindical y otros, quienes ostentan el poder a la fecha, evitar que lo logre. A estos últimos les pesará algo muy importante: ser traidores y no ayudar o por lo menos manifestarse, en su momento, a favor de la Maestra, quien era supuestamente su líder vitalicia.

Al final de cuentas, si hubiera sido una Reforma Educativa que cumpliera como lo dijeron, la telenovela no iría en el capítulo que ya vimos a través de los medios de comunicación: una conferencia de prensa donde la Maestra se justificó, se hizo la victima e inició su lucha para recuperar el liderazgo sindical que pretendieron quitarle. Para ello, utilizó el discurso más propio en este momento: recuperar los derechos laborales de los maestros y echar abajo la Reforma Educativa, que por cierto, el próximo titular del poder Ejecutivo en varias declaraciones ha confirmado.

Al cuestionar los medios de comunicación a AMLO si la Maestra estará dentro de su gabinete, la respuesta ha sido contundente: No. Precisando una total libertad y autonomía a la vida interna de los sindicatos; bien por él ¿pero será una forma velada para abrirle la puerta a la Maestra nuevamente en el SNTE? El tiempo nos dará respuesta e iremos conociendo los próximos capítulos de esta interesante telenovela política, sustentada en “recuperar los derechos laborales de los docentes y lograr una educación de calidad para los alumnos”.